Esta fruta es considerada por muchos como la fruta de la fertilidad.
Son ricas en taninos, de ahí el amargor de su piel, que también se utiliza en infusión para enfermedades de garganta, cólicos y diarreas.La granada es rica en pectina, tanino, antioxidantes, flavonas y fibras tipo escoba. Tiene vitaminas E, C, B1, B2, B3, B9, fósforo, cobre, hierro, cinc, calcio, manganeso y potasio.
Se pueden conservar durante mucho tiempo si no sufren golpes.
Sus manchas son difíciles de quitar.
Se pueden comer solas o acompañadas con unas gotas de vino moscatel, con nata o con salsa de chocolate.
Sirven de base para el jarabe "granadina", muy usado en coctelería, para regar macedonias de frutas o ensaladas varias.
A la granada se le asignan efectos favorables para aliviar el asma, la fiebre, las enfermedades cardiovasculares, evita la retención de líquidos y la flatulencia, ayuda a prevenir la hipertensión, la anemia ferropénica, los parásitos intestinales, la arteriosclerosis, el exceso de ácido úrico y además son bastante astringentes.
Un estudio recientemente realizado en el Centro para la nutrición humana de la UCLA y publicado en la revista Clinical Cáncer Research halló que el zumo de granada detenía el avance del cáncer de próstata.
No obstante, cabe aclarar, que las personas que tengan divertículos o irritación cólica, deben consumir la granada con precaución.